Tercera Jornada del Festival de Cine - "Amor en su punto"

“CUANTO TU COMO ACTOR LLEGA EL MOMENTO QUE TE CREES OTRA VERDAD, PORQUE NO ES UNA MENTIRA, ESTÁS CREYENDOTE OTRA VERDAD, Y EL QUE TIENES ENFRENTE SE LA CREE, ESO ES LA BOMBA”

Leonor Watling

Recalcamos que este es el Festival de los niños. Todas las películas al menos nos han mostrado alguno que nos ha cautivado ante cámara interpretando. “Amor en su punto” no ha sido una excepción aunque lo principal es la historia loca que experimentan en esta comedia con mucha cocina cuyo resultado es una risa sana, saludable y rica en disfrute y felicidad.

Quisiera resaltar otro aspecto que estoy denotando en este Festival que me apena y me preocupa y es la generación que está entrando de periodista, sobre todo, en terrenos digitales. Se ha puesto de moda, incluirnos a los medios webs, en sesiones de grupo donde vamos preguntando cada uno en un determinado tiempo a quien vamos a entrevistar. Y escuchar sentencias tales como “siempre se hacen las mismas preguntas y estarán cansados de respondernoslas” o “no he podido sacar nada de la película” y luego pelotear descaradamente al entrevistado o no llamar para saber si tus entrevistados van a venir y andar preguntandole a todos los que te encuentras vaya a ser que tenga que espabilar y trabajar un poco para tener lo que necesito, me desquician. ¿Por qué se ha perdido el currarse las cosas para diferenciarte de los demás y darle tu sello personal? ¿Por qué se ha perdido la improvisación y pretenden darse las preguntas antes para no pisarse en plan guión orquestado aburrido y absurdo?. No me gusta cómo no cuidan mi trabajo que defiendo y lo preparo a conciencia para obtener un buen resultado, como para escuchar y soportar estas tonterías. Espero que en lo que reste de Festival de Cine pueda hacer las entrevistas individuales.

Ya entrando en el tema de Amor en su punto. Para que escriban un papel destinado para una actriz en concreto, supone una responsabilidad y un honor, lo malo es que la propia actriz, Leonor Watling, ponga impedimentos naturales para que se retrase la película como es tener hijos. Superada esta barrera, localizaron a un partenaire de ensueño que convive con ella, encarnado por Richard Coyle, en esos estados de locura por los que pasan los personajes y se agradece que te den la receta de esta comedia ambientada en Dublin y que tiene muchísimos pequeños detalles con mucha magia culinaria.

En la rueda de prensa, la directora Teresa de Pelegrí, nos dice que les apetecía hablar de la comida, no desde el placer como estamos acostumbrados a ver, si no estando en nuestras vidas como conflicto. Y cuando descubres a estos personajes, te das cuenta que eso es cierto y que nuestra vida se rige en muchos aspectos importantes por la comida. Y mucho más cuando en esta historia de amor, ves desde el primer momento, que ellos están destinados aunque pasen por esa montaña rusa de emociones que experimentan.

Los que cocinamos nos vemos en muchos ingredientes de la historia, algo que tengo la ocasión de hablar con Teresa, “si tú cocinas algo, intentas cocinarlo con amor, pero si para la persona que lo has cocinado lo rechaza, entonces es como si te rechazara a tí, yo tengo amigos cuyos padres se dejaron de hablar durante años porque él era italiano y la madre de ella cocinó lasaña y era inglesa, y le dijo esto está muy bueno pero no es lasaña y entonces los echó de la casa y durante años no se volvieron a hablar”.

La directora, Teresa de Pelegrí

Se agradece las escenas en las que cocinan cuando están mal y cuando están bien porque se coreografiaron como un ballet y lo tuvieron muy ensayado. La idea que renace es que estén completamente compaginados, después en un momento de locura (de los muchos que tiene la película) cuando se vuelve vegetariana y están con esa guerra agresivo-pasiva es al contrario, chocan en la cocina, no coinciden, se obstaculizan y no pueden compartir ese espacio. Se convierte en una metáfora de lo que está pasando en la relación.

La distribución va a empezar por España y luego irán viendo la posibilidad de comerciarla en el extranjero ya que, por ejemplo, tuvieron muy buena aceptación en una sesión culinaria que tuvieron en la Berlinale. Se iría con las dos versiones, doblada y sin doblaje, y Leonor no se dobla a ella misma ya que lo hace la actriz, Alba Solá, que es la voz, entre otras, de Sandra Bullock, y Leonor con mucho humor le cede su puesto, ya que evidentemente tiene un Oscar.

A Leonor se nota que le gusta este tipo de comedia. Muchas veces pensamos que los actores la tienen denostada y en cambio ella, ve reflejados esos personajes imperfectos que aparecían en las historias de Howard Hawks y que ojalá se vayan recuperando este tipo de películas.

Amor en su punto siendo una comedia tiene su punto dramático en la relación que se establece entre el padre y el hijo, que es periodista gastronómico, algo que el progenitor no termina de ver. La locura de la que hemos hablado de estos personajes tiene a su vez un arco lógico de cómo se tiene que acabar en diálogos como estos del padre y el hijo y eso la verdad es que se agradece en una comedia de carcajadas y risas tontas, porque te relaja y ofrece un matiz diferente que te hace disfrutarla aún más. “Yo creo en llevar las emociones muy alto y después bajarlas de golpe, no siempre es fácil para el espectador pero me gusta jugar con diferentes niveles de emoción, yo creo que es importante en una comedia, cuando rodamos esa escena importante del padre, los técnicos irlandeses nos decían esto es mi padre, estas cosas son universales”

Tengo la oportunidad de hablar con Leonor sobre esas escenas que el espectador agradece por su divertimento pero le pregunto si ellos también como actores, les sirven para desinhibirse más, “es muy difícil hacer comedia, llegar al punto de dejarte libre como para que salga algo, en este caso estaba todo en el guión, cuando tu como actor llega el momento que te crees otra verdad, porque no es una mentira, estás creyéndote otra verdad y el que tienes enfrente también se la cree, eso es la bomba y cuando pasa te da igual el género que sea, y cuando pasa en comedia es muy divertido, cuando pasa en drama es como viajar en el tiempo, una cosa brutal”

Leonor Watling

Otro gran acierto es la banda sonora con artistas independientes que crearon músicas que tienen que ver con las propias escenas que ambientan. Durante la rueda de prensa, muchos nos cuestionamos que siendo Leonor cantante, no contaran con su grupo, Marlango, para alguna de las piezas e incluso, ella piensa lo mismo, reconocido por la propia actriz.

Incluyanla en su menú de degustación que se van a llevar muy buen sabor de boca.