Los escritores somos gente normal que vamos a comprar al supermercado (el de la famosa sintonía). Así se presenta Juan Gómez Jurado al público del fórum de la Fnac de Málaga cuando alguien le pregunta lo curioso que es que un escritor tan reconocido y con mucho éxito sea tan agradable y cercano como de verdad es él. Incluso pueden estar buscando una agenda antes de comenzar tu entrevista y aconsejarte que no lleves los libros encima y los guardes en la bolsa que traes. Estos detalles junto con su acertada y admirada ironía hacen que brille mucho más la naturalidad de su personalidad que veréis reflejada en esta entrevista y que cuando él bromea, aún diciéndolo en serio, que deben comprar su última novela “El Paciente” a nuestra pareja y familiares, sobre todo ahora que llega el día del Padre, no sólo debéis hacerlo por ese motivo si no porque nos ofrece un regalo literario, intenso y muy bien escrito, en el que sufriremos las 63 horas en las que el neurocirujano, David Evans, debe elegir si salva la vida de su hija o la del presidente de los Estados Unidos.
P: Hemos podido ver un booktrailer que ya es un trailer cinematográfico en sí, la estructura en la que has diseñado el libro es de película total, ahora te exijo que lo hagas igual con “La leyenda del dragón” y mi favorita “Espía de Dios” que no sabes lo que me gustaría ser Paola Dicanti.
Juan Gómez Jurado: Es mucho más bonito si se pudiera hacer de la misma forma con actores reales pero cuesta mucho dinero. Hacer un booktrailer de estas características requiere un casting, una producción específica y un director en condiciones. Y se puede hacer cuando se puede hacer.
P: Y bueno la gente dirá pues tiene paralelismos con muchas de las series que podemos ver de este género, incluso con lo de Sr White ya he escuchado homenaje a “Breaking Bad” pero lo más complicado supongo es adaptarlo para darle, más que nada, ese ritmo frenético y que funcione. Que son 63 horas, una odisea estilo el “Ulises” de James Joyce.
Juan Gómez Jurado: Lo del Sr. White me hace mucha gracia porque yo lo llamé así porque era precisamente lo opuesto a lo que él representa, entonces me parecía muy gracioso el que fuera de esa manera. De hecho, fíjate cómo hemos escogido el blanco para la portada del libro, un color extremadamente raro de utilizar en la ficción y más en la ficción de este tipo. Lo bonito de esta historia es que son 63 horas sólo, lo cual requiere un ritmo tremendamente especial, pero está contado cuando ya ha sucedido todo no mientras está sucediendo. David lo que se permite es contar su historia desde el corredor de la muerte, lo cual hace más compleja la historia de narrar y bueno me resultaba muy divertido y muy atractivo el poder llevar a la gente, que con este juego y de esta forma en la que no supieran exactamente qué estaba pasando ni porque había sucedido todo. Los que me conocéis de mis anteriores libros, sabéis que no me gusta que ninguno se parezca al anterior y eso es fundamental. Para mí, hubiera sido muy sencillo escribir todos mis libros como “Espía de Dios”. Hay gente que coge un personaje, lo repite, le cambia un poco el argumento y vuelve a hacer la misma novela. Para mí, eso me resulta tremendamente aburrido.
P: ¿Por qué David Evans no lo tiene claro, su hija antes que el presidente? Cualquiera que tenga hijos, aunque yo no los tengo, lo tendría claro, ¿no?
Juan Gómez Jurado: ¿O no? Es tu hija pero el presidente es tu responsabilidad. Precisamente, cuando tú lo has visto, si a tí te preguntan, ¿qué harías tú?. Respondes a la primera pero ¿a que leyendo el libro te das cuenta que no es tán fácil?. La parte más bonita de “El Paciente” es el que tú puedas empatizar con los personajes en cada momento, que estés sintiendo lo mismo que ellos e incluso les grites por encima del hombro y les digas ¡No hagas eso!. Pero de tas cuenta que las cosas no son tan sencillas como uno podría imaginarse y que los dilemas que ellos viven, los vives tú también. Normalmente, la vida no se trata de una decisión que tú tienes que tomar en un único momento porque probablemente si a David le dicen aprieta este botón para el presidente y aprieta este botón por tu hija no es así, la vida se compone de pequeñas decisiones sobre una gran decisión y eso es lo que realmente te das cuenta que estás descomponiendo un gran dilema en más pequeños dilemas que es lo que obligan a que David lleve el camino que recorre y eso es lo que llevamos todos. ¿A ti no te ha pasado que alguna vez podías haber quedado con tu novio o con tus padres y no lo haces porque tienes trabajo? Y probablemente a tí te dicen, ¿qué es lo primero, tu familia o tu trabajo? Y también responderías la familia, sí pero luego no actúas de esa forma porque las pequeñas decisiones del día a día son las que te van marcando, pues a David le pasa lo mismo. Yo pretendía romper los esquemas de los lectores, eso es lo tremendamente interesante. Cuando tú tienes una cosa muy clara y te llevan por la dirección contraria, dices ¡Ostras, me ha hecho pensar!. Es una novela que te hace pensar en cada uno de los capítulos, ya no sólo por los dilemas si no porque los aplicas a tí mismo.
P: Se va a hacer una adaptación cinematográfica de este libro, aunque yo lo veo más como serie
Juan Gómez Jurado: No, no. Esto tiene que ser una película. Tiene que ser algo muy concreto, muy corto e impactante. Una película que te golpee en la cara y que no te suelte. Es como a mí me gustaría que fuese. “La leyenda del ladrón” en cambio podría ser una serie fantástica y llevarías seis o siete capítulos y sería estupenda. Yo quiero que la protagonice Clive Owen, aunque no sé quién saldrá (durante el forum también saltó el nombre de Robert Downey Jr.)
P: Creo que tú, junto con Lorenzo Silva, sois los más innovadores y con la mente más acertada, en cuanto a cómo se encuentra ahora mismo el mundo literario. No demonizais Internet y lo que implica para vosotros. Proporcionáis siempre algunos capítulos y en algún caso el libro para que la gente lo pueda obtener y no vaya a lo fácil que es descargárselo. ¿Por qué optaste por esta postura que personalmente considero más inteligente y no entraste en el saco de la victimización porque el público no nos ayuda comprando mis libros?
Juan Gómez Jurado: Yo creo que la vida todo se acaba resumiendo a una cosa. Tú eres una persona que tienes a otra persona enfrente y esa persona puede ser un lector en una librería o podemos ser tú y yo que estamos charlando aquí tranquilamente o puede ser una persona que está al otro lado de una red social. Pero lo que hay entremedias, no deja de anular el hecho de que tú lo que tienes enfrente es una persona. Tan sencillo como eso. Si tú tratas a esa persona como una persona obtendrás un resultado de persona. Hay que comportarse en twitter y en todas partes como en la vida, igual que vas a un restaurante y pides las cosas con educación, pues esto es lo mismo.
P: Y ahora qué hacemos con el crowfunding, ¿por qué no se permite que la gente pueda hacer sus creaciones culturales si tomar esa opción no perjudica a ningún Gobierno de ningún color?
Juan Gómez Jurado: Exactamente por el mismo motivo por el que un señor que en su vida va a tener un embarazo, se mete a legislar sobre el aborto. Al final, yo veía la plataforma de la legislación sobre el aborto y eran 15 hombres. Aquí pocos úteros veo. No tiene ningún sentido. Es lo mismo. Es un desconocimiento absoluto de lo que significa Internet y de los que nos puede aportar a todos pues ¿qué queremos esperar?. Este Gobierno creo que no ha dado una a derechas y mira qué es difícil.
Después de una confesión radiofónica parroquiana donde intento sorprenderle y logra sorprenderme más él a mí con reacciones de whattsap en riguroso directo, nos dirigimos al lugar de la presentación con un aforo completamente lleno donde Juan Gómez Jurado, vuelva a dar una lección de brillantez cómica y a la vez muy agradecida con los comentarios y aportaciones que se extraen de la charla. Creo que los lectores debemos reconocer y agradecer que se nos trate de la manera que lo hace este escritor y que muchos deberían aprender. Para alguien que ha dedicado tantas horas en crear un libro con el suspense, la tensión pero más que nada, la satisfacción de sufrir con el protagonista toda su andadura, que luego llegue un señor que le diga que ha estado sin dormir leyendo los capítulos teniendo que madrugar al día siguiente y que el propio Juan le dedique la mejor de las sonrisas y comentarios jocosos, hace que merezca la pena. Y ellos también tienen derecho a que les demostremos nuestro amor. Por cierto, ya sabes que si se hace adaptación de “Espía de Dios”, Paola Dicanti, soy yo, sin ninguna duda o no te dejo que firmes mi ebook.
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