Tercera Jornada del Festival de Cine de Málaga - "Los Fenómenos"

Equipo de "Los Fenómenos"

DICOTOMÍA

Tercera jornada del Festival de Cine de Málaga que empieza con este “pelotazo” urbanístico que me aventuro, antes de los días que nos quedan, que va a ser mi gran favorita para que se lleve la mayor parte o todos los premios que puedan por plasmar un cine que hace tanta falta como el de la capacidad de entretener. Pero la tarea de “Los Fenómenos” ha sido mas ardua pero con un resultado brillante por su buen trabajo

Xulio, Xose y Lola

La crisis está más que reflejada en esta película en diversos aspectos que te tocan el corazón de la manera que tienen que hacerlo, con la verdad, la que refleja la protagonista, Neneta. Una espectacular Lola Dueñas, con compañeros de reparto que la catapultan y nos muestran el reflejo de personas que tenemos a nuestro alrededor o de nuestra propia familia que pasan por las mismas situaciones. Un piso que pudieron comprar, mal construido con materiales baratos y vendiéndolo a precio de oro y que, tras llegar los años donde el número de afectados por la hipoteca supera los 2 millones, se tiene que vender o directamente llegamos al deshaucio. Igualmente, no sólo se ven a los que sufren este problema, también a los que lo provocaron y nos hicieron creer que podíamos ser ricos, cuando los beneficiados eran ellos mismos. Aprovechando la ocasión de hablar con el director, Alfonso Zarauza, expresa que “los que salieron bien librados de la película son como más invisibles, porque los que salieron de la crisis son invisibles también, pero al final están ahí, son los que manejan los hilos y hacen que, los que perdieron aparezcan como aparecen, completamente determinados en la historia, el personaje de Lola ya no puede tomar decisiones por si misma, es un personaje que desde el principio de la película está tomando decisiones en situaciones complejas y esa toma de decisiones la hace fuerte porque es capaz de superar cosas a través de esas decisiones que son las que marcan su carácter pero al final está completamente determinado y ya no toma decisiones por si misma, ni siquiera puede elegir entre su amor, porque la crisis ya ha tomado la decisión por ella y está completamente determinado y es un personaje que al principio empieza de una manera y termina de otra, nos tiene que hacer sentir una reflexión de ¿qué pasó? Y ¿por qué llegamos a este estado?

Quienes puedan pensar que al cine no se va a pasar melodramas baratos ni historias serias, cometen un error garrafal, porque perderían la gran maestría de Alfonso a la hora de contar la historia, directa, a través de esa Neneta que tiene que luchar en un mundo de hombres, en la obra, ganándose su sitio y contagiando su bondad a todos los demás. Según han contado en la rueda de prensa, incluso Lola Dueñas se convirtió en una máquina de poner ladrillos. Tenían claro que el papel era para ella y así lo escribieron, con la intención de crear un personaje con mucha fuerza integral y no terrenal. Los actores también se hicieron obreros y si no apuestan por esta historia, se perderían los matices que ofrece cada uno de ellos. La persona jubilada que vuelve al curro aunque no le vayan a pagar, luchar por un premio banal como puede ser una empanada para demostrar un reconocimiento vacío que no sirve para pagar las trampas de todos los meses.

Se creó una estructura a la hora de realizar el guión porque tenía que ser compleja pero verdadera para que luego la fueran llenando de contenido. Fue mucho tiempo de trabajo y de escritura, un año y medio concretamente, haciendo versiones de guión para llevarlo a la sutileza y evitando primero los tópicos, luego las cosas más torpes, luego las más evidentes y al final fueron limpiando quedándose con lo esencial. 

“Puñetazos emocionales” es lo que califica Alfonso Zarauza cuando le pregunto por ese sueño que todos tenemos de tener una casa y tener los pies en la tierra y en realidad, estamos hipotecados hasta las orejas y sin un duro. “Es real, pensamos que el hecho de comprarnos un piso e hipotecarnos nos iba a hacer feliz y no es así, es una circunstancia a la que tenemos derecho como todo el mundo” sentencia Alfonso Zarauza.

Hay un riesgo de reflejo tan enorme y a la vez eso es lo que hace tan grande esta película que le cuestiono a Alfonso si tuvieron en cuenta esa circunstancia, a lo que me responde “dimos muchas pinceladas para hacer una composición compleja pero con pequeñas de aquí y allá, y sobre todo, donde queríamos ahondar era a través del personaje de Neneta, todos los personajes cumplen una función y complementan o a veces son antepuestos al personaje de Neneta y lo van complejizando, si todo eso está bien hilvanado pues funciona muy bien”

Alfonso Zarauza

Y hay pinceladas de humor, sorna gallega, que pudieron comprobar Alfonso y la guionista, Jaione Camborda, cuando recurrieron a un equipo de obra para verles funcionar y retratar de la manera más fidedigna posible su trabajo. Y en esos diálogos, se metían unos con otros, buscaban hacerse bromas y cuesta mucho incluir esos detalles en una historia tan crítica pero se hace de una manera que te alivia esos momentos tensos, a la vez que te sigue captando la atención por lo que se denuncia en la película. Es como esas buenas obras de teatro que te ríes a carcajadas y a la salida, empiezas a percatarte que no era tan divertido de lo que te estabas riendo y había mucho más escondido en esa carcajada. “El humor es importante tratarlo para que no sea zafio, me explica Alfonso, me interesa el humor sutil y que tiene contenido, en las escenas de humor de la película te hacen reír pero no sólo tiene la función de hacerte reír si no que te haga reflexionar”

Incide, por ejemplo, en un personaje que es el de Curtis, “un chaval que abandona los estudios prematuramente embelesados por los cantos de hadas del dinero y dejaban de estudiar y a trabajar en la construcción y ahora están bastante jodidos”. En la presentación, el actor que le encarna, Xosé Touriñán, comentaba que en Galicia, toda esta gente que se dedicaba a la construcción, no sabe que hacer y tiene que volver al mar. Volviendo a Alfonso, recalca “alguien que a los 20 años no tiene futuro es muy duro y esas personas también tienen sentimientos y tienen alma”.

Quiero que mi película sea visible gracias al Festival de Cine de Málaga, conclusión que le sacamos al director como parte positiva que se quiere llevar de esta experiencia. Precisamente esa es la respuesta que nos irán mostrando estos realizadores porque el cine español se encuentra en un estado de invisibilidad que, de repente, no se escucha hablar de ella y sería algo imperdonable. No tiene fecha de estreno, están pendientes de cómo funciona en estos certámenes, pero ya se está hablando con un par de distribuidoras importantes. Por mi parte, me llevé mi mejor regalo de cumpleaños, disfrutándola. Me mojo y ojalá gane todo lo que pueda ganar.